The Untouchables
Spoiler alert. Todo lo que sucede en la pantalla es mentira. Bah, más o menos. The Untouchables (1987) es el epítome de las películas “basadas en hechos reales”. Como esas bebidas que se publicitan como "jugo natural de naranjas exprimidas" y contienen 10 por ciento de jugo de fruta. El resto: colorantes, conservantes e incluso desechos reciclados (léase: cáscaras pulverizadas). Va un botón de muestra. La película nos muestra que Eliot Ness (Kevin Costner) tiene una hijita y su esposa está embarazada con un varoncito, que nace al final de la cinta. Qué bonito, qué tierno… pero no, en la vida real Ness tenía un hijo varón –uno solo, cero hijitas– y era adoptado. Pero bueno, no dejemos que la verdad se interponga en el camino de una buena historia. La película entretiene, y además tiene un reparto interesante. Tiene a Sean Connery, que aún haciendo de un policía ficticio se alzó con un Oscar. Y a Robert De Niro, que eligió hacer un Al Capone que poco y nada se parece al real,