Doctor Strange in the Multiverse of Madness

Si luego de ver Wandavision la Bruja Escarlata te caía gorda… ¡ahora la vas a odiar aún más! Reseña sin spoilers pero con lo suficiente para que sepas a qué atenerte.

Hola gente linda, anoche me vi un par de películas y una de ellas fue la nueva del Doctor Strange. ¿Me gustó? Sí. ¿Podría haber sido mejor? Sí. Pero, una vez que uno se hace a la idea de que el MCU es una realidad distinta de la de los cómics, no hay mayores inconvenientes. Y es una película dirigida por Sam Raimi, afortunadamente no el Sam Raimi de Spiderman 3 (2006) sino el de las dos primeras entregas.

Más arriba dije, reseña sin spoilers. Bueno, ahora me desdigo y pongo un solo spoiler, bien chiquitito: al final, luego de cinco años y varias películas, por fin Strange le cambia el cristal al reloj. ¡Era hora! Habiendo dicho eso, voy con una rápida enumeración de lo que me gustó y lo que no, como si estuviese caminando sobre cáscaras de huevo para no quemarle la película a nadie.

Pero antes, tengo que aclarar que soy un lector inveterado de los cómics de este personaje, y si bien no me considero un experto en él ni mucho menos, hay cositas y guiños que tal vez se le escapen al espectador ocasional o que sólo ha visto el MCU, pero van a sumar disfrute para quien esté un poco familiarizado con los cómics clásicos y no tanto. ¿Se acuerdan del Darkhold? ¿Y de Rintrah? Bueno.

Por otra parte, ahora ya estamos en las entrañas del Universo Marvel. Ya no estamos en el nivel fácil sino en el de dificultad media. Así es, ya pasamos la parte más superficial, en la que casi cualquiera podía reconocer a los personajes, cuando teníamos al Capitán América, a Hulk, a Thor. Ahora tenemos a… América Chávez.

¿Es bueno eso, o es malo? Y, hasta cierto punto lo prefiero a lo que venía haciendo la competencia. Durante décadas, sólo películas de Batman y Superman, Batman, Batman, Batman… En cambio, para bien o para mal, el MCU se arriesgó con los Guardianes de la Galaxia, o incluso con los Eternos, y por supuesto, con el mismísimo Doctor Strange o con Ant-Man, evitando aburrir con los héroes más conocidos que mencioné en el párrafo anterior.

Mención aparte para las dotes actorales de Xochitl Gomez, que por momentos están a mitad de camino entre las de Sofia Coppola en El padrino, parte III (1990) y las del pibe que aparecía con Schwarzenegger en El último gran héroe (1994). Sin embargo, mal que mal la chica se defiende y, de última, sucede aquí como con George Lazenby cuando le tocó hacer de James Bond: la película se sostendría incluso si hubiésemos puesto un trozo de pavimento en lugar de la pobre Xochitl.

Asimismo, en un momento dado, una de las versiones de Christine Palmer le dice a Strange que en su mundo (el de ella) la Tierra a la que él pertenece es llamada "616". Eso no significa que la Tierra del MCU sea la misma que la de los cómics clásicos (o sea, la de la tía May decrépita), sino que en ese mundo en particular (en el que se desarrolla la escena) la denominan así. Res ipsa loquitur. Y ahora, para ir cerrando…

Lo que me gustó

• No es novedad que Wong es un personaje valiente y combativo, pero en esta película realmente le hacen cobrar mucha chapa.
• Los callbacks a la película original. Por ejemplo, en la primera película, Strange toma un objeto para defenderse, y Kaecyllius le pregunta si sabe para qué sirve ese objeto. Strange no sabe. En esta película vemos cómo otro personaje lo usa correctamente. Otro ejemplos: el reloj de Strange, el que se hayan acordado de Nicodemus West.
• Las distintas versiones de Strange en las varias realidades, incluidas algunas no muy halagüeñas.
• La relación y los diálogos entre Strange y America.
• Algunos de los cameos, en especial el de Bruce Campbell.
• Que no sea una película excesivamente larga.

Lo que no me gustó tanto

• Lo predecible de algunos desarrollos del guión, que se ven venir de lejos.
• Que algunos personajes hayan tenido muy poco tiempo en pantalla. Pero bueno, tampoco queríamos una película de tres horas.
• Que básicamente haya habido sólo uno o dos cameos realmente interesantes en toda la película.
• Que no se haya manejado mejor la conexión entre la película y lo sucedido en Wandavision.
• ¿Recién ahora se acuerdan de Christine Palmer?

A quien haya visto Wandavision y no se tragó lo del "tremendo sacrificio" de Wanda en la miniserie, la tipa le va a seguir pareciendo una paparula. Por otra parte, a quienes no hayan visto la miniserie en cuestión les sugiero que no hagan caso al canto de sirena de los que dicen que es necesario verla para entender esta película. ¿Van a perder 10 horas que nunca volverán para saber qué pasa con los nenitos? Veamos si puedo resumirlo en un párrafo:

Los patitos no le nadan en fila a Wanda desde que Thanos destruyó a la Visión, que era el androide que le hacía mimitos. En su locura, la tipa esclavizó a los habitantes de un pueblito y fabricó una realidad edulcorada que incluía una Visión de mentiritas y unos hijitos imaginarios. Cuando se le desbarató ese tinglado, la tipa quedó sin hijitos y aún más chapita, lo que nos lleva al inicio de la película.

Listo, ¿y ahora? No espero agradecimientos ni dinero en efectivo, pero les sugiero que dediquen esas 10 horas que acabo de ahorrarles para aprender origami, organizar su colección de estampillas o cualquier otra tarea de utilidad marginal. Por la misma moneda, tampoco hace falta ver la última de Spider-Man, ni las de los X-Men, aunque no estaría de más volver a ver Doctor Strange (2016), para apreciar la evolución del personaje.

En cuanto al aspecto técnico, los efectos especiales y la cinematografía son espectaculares (cosas especialmente importantes en una cinta tan fumada como ésta), la música de Danny Elfman apenas repite los leitmotivs de la entrega anterior (por Marco Beltrami) pero consigue la suficiente personalidad para no ser una simple copia. (De hecho, escuché la banda de sonido días antes de haber visto la película, y resulta completamente disfrutable per se.) La última escena pos-créditos (con un cameo de Charlize Theron) implica que habrá una tercera entrega, pero no sé cuánta credibilidad le doy. (Recuerden el pos-créditos de la entrega anterior, que prometía a Mordo como antagonista, y sabrán el porqué de mi reticencia.)

¿La recomiendo?Sí. Hasta ahora, en general, la Fase 4 venía con un puntaje de calidad más bajo que las anteriores, con una película horrible (Eternals), dos mediocres (Black Widow, Shang Chi) y una bastante decente (No Way Home). Esta secuela de Strange, sin ser sublime, es cuanto menos disfrutable, y recomendable para pasar un buen momento.

FICHA TECNICA
Tïtulo original: Doctor Strange in the Multiverse of Madness
Año: 2022
Director: Sam Raimi
Guión: Michael Waldron
Con: Benedict Cumberbatch, Elizabeth Olsen, Chiwetel Ejiofor, Benedict Wong, Xochitl Gomez, Rachel McAdams, Michael Stuhlbarg, Bruce Campbell.
Duración: 126 min.

Esta reseña es original del blog de Betina. © 2022 Hugo C. Se permite su reproducción mencionando la fuente. .